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lunes, 12 de julio de 2010

La Roja

No soy yo muy partidario de usar la bandera rojigualda, quizás por las connotaciones peperianas que conllevan..pero no puedo dejar de reconocer que me he visto emocionado ante la cantidad de banderas y camisetas españolas que he visto en el último mes en Cádiz, sea en los balcones y ventanas de las calles, como indumentaria de hombre, mujeres y niñ@s, y en taxis, autobuses, coches o camiones....No es un sentimiento patriótico el que me ha embargado por la victoria de la selección española o el uso de la insignia nacional, sino la sensación de comunión, en el sentido literal de "común unión", que se ha notado, no solo en mi ciudad, sino en todo el territorio nacional.
Además de que la Roja mereciera ganar el mundial de fútbol, porque es, desde hace años, la mejor en juego, y por justicia con respecto a agravios del pasado, sean mala suerta o arbitros arbitrarios, valga la redundancia, que no han permitido el triunfo en el máximo campeonato de este deporte a nivel mundial, esta victoria ha supuesto un bálsamo de paz, un reducto de concordia y felicidad, efímera, pero felicidad, al fin y al cabo, para tantos millones de personas en España, hastiados del calor intenso, aumentado por el calentamiento global, desesperados por la crisis económica, por el paro que tanta angustia está provocando en l@s afectad@s y sus familias, y por la incapacidad de nuestr@s polític@s, sean de izquierdas, centro o derechas, para solucionar la mencionada crisis de manera eficaz y sin que afecte más a la sociedad en su conjunto o para ponerse de acuerdo en como combatirla.
En este último mes, y ojalá que dure algo más, la sociedad se ha podido evadir de tanta miseria económica y moral, para centrarse y unirse en una causa común, vanal para much@s, como es el fútbol, pero conductor de tanta ansia y esperanza en algo hermoso, noble y heroíco, que sublima y eleva nuestras emociones, que une a hombres y mujeres, niñ@s y adultos, ric@s y pobres, heteros y gays, de izquierdas y de derechas...

Nuestro país necesitaba este regalo, en forma de copa dorada, como objetivo de tantos partidos y victorias, para consolarse de sus desgracias y hacer que el prójimo esté más unido....
Algun@s pensarán , y me incluyo en ell@s en muchas ocasiones, que el fútbol es el pan y el circo del siglo XXI, que es solo un juego de 22 hombres llevando pantalones cortos, que no hemos ganado ni un euro de las suculentas primas que se van a llevar los jugadores o que no somos ni la reina ni los Princípes de Asturias, que han viajado a Sudáfrica, de manera gratuíta, a ver el partido en directo. Es cierto......tan sólo es un sueño y una ilusión, pero esta vez, solo esta vez, y quien sabe cuando será la próxima, me dejo contagiar por el pan y el circo contemporáneo porque sin sueños comunes no somos nadie ni somos felices.

3 comentarios:

  1. ¡Hola Luis! tus palabras son muy bellas, pero yo insisto en el "Pan y Circo" la verdad...hay una curiosa teoría por ahí...te envio el enlace:
    http://elchistedemel.blogspot.com/2010/07/veranito-9.html

    Un abrazo¡¡
    Ana :)

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  2. Me ha gustado, Luis, pero no entiendo eso de que "No soy yo muy partidario de usar la bandera rojigualda, quizás por las connotaciones peperianas que conllevan". LA bandera española tiene más de 500 años de historia, y no es un invento del PP, lo que pasa es que a la izquierda española parece que la da vergüenza y urticaria mostrarla sin complejos como lo hace el PP. Hay que dejar estúpidos fantasmas del pasado (tampo la bandera es un invento de Franco) y sentirse orgulloso de ella cuando la veamos. Al menos, así de orgulloso me siento yo de verla ondear allá donde esté.

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