Viaje a Alcalá de los Gazules y excursión por el Parque de los Alcornocales

Como algun@s sabéis, los próximos días 12, 13 y 14 de febrero, nos iremos al "exilio carnavalesco". No, no es que sea un hijo devoto de Doña Cuaresma, más bien manifiesto una alergia a las Carnestolendas desde tiempo inmemoriables. Creo que me viene de una reencarnación anterior. Así que , para evitar estar presente en el decandente ambiente que invadirá las calles de Cádiz, nos marchamos...¿A dónde? Pues, a pesar de la crisis económica, las viviendas en la Sierra de Cádiz están ya esperando a numeros@s gaditan@s, quienes, como nosotros, no desean participar de las fiestas que se avecinan, cual tormenta invernal...resumiendo..las casas de la Sierra están ya más que reservadas desde hace tiempo.
Tenemos como obstáculo el hecho de que muchas viviendas y casas rurales ponen pegas, por no decir que prohiben, a mascotas..y este es nuestro caso. Obviamente no ibamos a dejar a nuestro queridísimo Timy por estos lares.
Finalmente, después de una breve pero intensa búsqueda, encontramos una casa en Alcalá de los Gazules, apta para nosotros, para todos nosotros, y en las mismas puertas del Parque de los Alcornocales....
Es un paraje ya conocido por mi, no solo en tiempos de las famosas excursiones de la Salle Viña, sino posteriormente, en estancias como monitor de la ludoteca La Selva.
Un lugar precioso,que no tiene nada que envidiar a los mejores bosques del norte de España o incluso de Europa.

Y allí estaremos los días mencionados, descansando en la casa rural Casa Bárbara, visitando el jardín Botánico El Aljibe, situado en las afueras del pueblo,y realizando una pequeña ruta, si el tiempo lo permite, por la Garganta de Puerto Oscuro, un pequeño riachuelo, afluente del río Barbate, que cruza el parque y forma parte de la mencionada ruta.
Es fácil de recorrer, no solo por la orografía del terreno, sino por la duración de la misma (se estima que entre 40 y 60 minutos). Es una ruta circular que circunvala la Charca del Picacho, una pequeña laguna, situada en una hondonada y que da al lugar un ambiente fresco y magnífico, apto para el disfrute de la naturaleza circundante: Alcornoques, principalmente, pero también acebuches, gamones y brezos.
Esperemos que encontremos también algún quejigo en la zona.
Ya publicaré fotos y comentarios la semana que viene para compartirlo con todo el mundo.